Emerge imponente en el centro de la ciudad el Convento de San Gonzalo, invitando a pararse unos minutos y contemplar esta referencia local, monumento nacional desde el 16 de Junio de 1910. Era el año 1543, cuando fué colocada la primera piedra, precisamente en el local en donde anteriormente había sido construída una ermita en honor a San Gonzalo. La riqueza y diversidad de elmentos arquitectónicos son el testimonio de las diversas etapas de su construcción, durante 80 años, pasando por varios reinados y tomando influencias renacentistas, manieristas, barrocas y del S. XIX. La fachada principal, la más sencilla, contrasta con la lateral, más imponente, con un magnífico portal - retablo, designado por Varanda dos Reis, en donde figuran las estátuas de los cuatro monarcas patrocinadores de su construcción: D. João III, D. Sebastián, Cardenal Rey D. Enrique y D. Felipe I. En la planta baja, de estilo renacentista, S. Francisco y San Domingos son los protagonistas. Sobre el arco sobresalen dos figuras (con barba) que dicen ser los reyes David y Salomón. Ya de estilo manierista, en el segundo piso, sustentado por seis columnas con capiteles corintios, encontramos la imagen en piedra de San Gonzalo, siento su base un puente de tres arcos con almenas. Dependencias conventuales en los laterales de la iglesia, forman (en el 2º claustro) el Museo Municipal Amadeo de Souza-Cardoso, terminando (en el 3º claustro) con la base de las instalaciones del Pazo del Ayuntamiento.
Ubicación: Amarante
