Exposición Intersticial: Diálogos en el Espacio entre Acontecimientos I y II
Con obras de artistas portugueses que cubren un período comprendido entre los años sesenta hasta la actualidad, intersticial: diálogos en el espacio entre los eventos propone una relectura Colección Norlinda y José Lima. La exposición se desarrolla en dos etapas que le permiten trabajar con mayor profundidad el gran núcleo de la colección de arte portugués. Pensar el objeto artístico como acontecimiento remite no sólo a un plano filosófico (donde las lecturas del arte como acontecimiento enHeidegger o Deleuze son determinantes), pero como posibilidad de mirar las propuestas artísticas como estructuras significativas complejas. El acontecimiento puramente visual se enfrenta a una serie de acontecimientos-otros que pueden llegar a ser pertinentes, tanto a nivel de la historia social y política, de las circunstancias de los sistemas de representación, de los sistemas de articulación institucional y de los sistemas de representación temor crítico. En cuanto entidades flotantes en esa cuadrícula mutante, la yuxtaposición de energías complementarias o contradictorias que la simple colocación lado a lado de obras de épocas y autores diferentes representa, apunta a un espacio interpretativo que esos vacíos reclaman con tanta intensidad como a veces la mirada concentrada de la obra en sí parece demandar. Es en el diálogo continuado de estos pasajes que a veces más efectivamente se acaba por aprehender la singularidad en la diversidad. Será éste uno de los designios y desafíos mayores en la concreción de una exposición colectiva: la posibilidad de una articulación discursiva que se instaure por vía de los vacíos, espacios-entre, para que la mirada sea permeable al pensamiento.
Con obras de artistas portugueses que cubren un período comprendido entre los años sesenta hasta la actualidad, intersticial: diálogos en el espacio entre los eventos propone una relectura Colección Norlinda y José Lima. La exposición se desarrolla en dos etapas que le permiten trabajar con mayor profundidad el gran núcleo de la colección de arte portugués. Pensar el objeto artístico como acontecimiento remite no sólo a un plano filosófico (donde las lecturas del arte como acontecimiento enHeidegger o Deleuze son determinantes), pero como posibilidad de mirar las propuestas artísticas como estructuras significativas complejas. El acontecimiento puramente visual se enfrenta a una serie de acontecimientos-otros que pueden llegar a ser pertinentes, tanto a nivel de la historia social y política, de las circunstancias de los sistemas de representación, de los sistemas de articulación institucional y de los sistemas de representación temor crítico. En cuanto entidades flotantes en esa cuadrícula mutante, la yuxtaposición de energías complementarias o contradictorias que la simple colocación lado a lado de obras de épocas y autores diferentes representa, apunta a un espacio interpretativo que esos vacíos reclaman con tanta intensidad como a veces la mirada concentrada de la obra en sí parece demandar. Es en el diálogo continuado de estos pasajes que a veces más efectivamente se acaba por aprehender la singularidad en la diversidad. Será éste uno de los designios y desafíos mayores en la concreción de una exposición colectiva: la posibilidad de una articulación discursiva que se instaure por vía de los vacíos, espacios-entre, para que la mirada sea permeable al pensamiento.
